Cuando el Señor comienza a brillar, no sólo en tu interior, sino también en tu exterior, ahí es cuando el reino de Dios se hace visible a los hombres. Hoy…
Cuando el Señor comienza a brillar, no sólo en tu interior, sino también en tu exterior, ahí es cuando el reino de Dios se hace visible a los hombres. Hoy…